Artigas es socialista

No no no!!! No hablo del prócer propiamente dicho... El barrio caraqueño de Artigas se me ha descrito por sus habitantes como un barrio socialista!!! mejor dicho en la transición...

Y entre esa consignas de que todo es para todos se coló el stencil que dejé con su respectivo aerosol arriba de una mesa del "club del barrio", donde quedó una semana mientras me acordaba de no olvidarme... Me sentí tan feliz de que quienes encontraron el set de grafiteo hayan escrito sus propias paredes con la palabras que cargo, que recuperar mi propiedad privada al encontrarla en el exacto lugar que la había dejado casi que fue algo secundario...

Solo fotos que no dicen nada más que lo que dicen...

No porque no pretendan decir más nada; digo, ellas... porque las fotos en sí no pretenden nada, solo dicen... pero claro, en principio yo sí quiero decir algo, y por eso... fotos!! pero decir decir, lo que se dice decir; no digo nada... y eso que no decir nada también es decir!!!

La cosa es que de foto en foto siempre voy diciendo, y no diciendo lo que digo con no decir lo que no digo, no digo lo que no necesita ser dicho... por suerte empecé a escribir sin saber lo que quería decir!!!

"...porque los conceptos dicen lo que dicen, pero las palabras dicen lo que dicen y además algo más y otra cosa." (Raquel Lazzari)

Eso es una cumbia!!!

La vida está llena de maestros; algunos se visten de esos ropajes desde antes de que lleguen a nosotros… otros precisamente se anuncian así por nuestra presencia…

Dicen que los mejores son los que hacen que los demás hagan lo que necesitaban hacer, y además sintiendo que lo hacen por sí mismos… Algunos maestros ni siquiera saben que lo son: lo son…

Cada vez que alguien me dijo “seguíme que esto es así” me sacó una puteada…

Cuando el alumno está pronto el maestro aparece solo.

Piedra, papel o tijera...

Sin dudas: viajando o como sea, el mayor autoconocimiento es el que viene de la mano de alguien más...

Viento, agua, fuego y tierra

 

Hablar de “los elementos de la creación” tiene más tiempo que el ser humano, y de rincón escondido en rincón no tan escondido vengo escuchando cosas increíblemente parecidas sobre la gestación de la vida, del ser y del universo.

Nada me conecta más con esa cosmovisión que el silencio.

Puertas

Si cada casa es un mundo, cada puerta que se abre es comunicar los universos que conviven en la armonía del desconocimiento del otro…

Así que ese viajar de universo en el universo que es cada casa, entre muchas otras cosas también es descubrir una forma nueva de agradecimiento; la que transmite la gente que abriendo la puerta de su mundo te deja ser parte de su sana locura, la que todo lo cura…

Solo por pelear…

Desde que empecé a viajar que tengo una contienda con la fascinación de mi tía por la arquitectura y la historia que guarda; escondo mis ganas de no andar por lugares tan enloquecedores como habitualmente son los que tienen grandes exponentes de construcciones hechas por el hombre con una “investigación” acerca de los lugares construidos por ese alguien que inteligentemente se escondió atrás del Big Bang, el génesis o como quieran llamarle…

Así que cada tanto me dedico a practicar, de oficio, un poco de retórica, solo para divertirme argumentando en favor de las cosas hechas por la Naturaleza en contraposición a las hechas por el Hombre; en realidad creo que en el fondo son lo mismo.

Arte en las paredes

 

Ver tanta meticulosidad en el trabajo de alguien siempre me gustó.
Y creo que para todo el mundo despierta algo de curiosidad ver a otra persona desplegando su arte; nunca me alcanzó la descripción de “vago” de quienes miran a su compañero de cuadrilla haciendo el pozo…

Capaz que por eso empecé a mirar las paredes con otros ojos, entendí que lo que hace que un atardecer sea un atardecer no es el instante en el que el sol se cae, y encontré una foto en una calle…

Claro que toda playa tiene sus otras cosas...

Y no digo “otras” cosas porque de una no se vean, es que parecería que cuando el espíritu se libera de esas cositas que complican el entregarse a disfrutar no queda otra cosa que disfrutar…

Encontrar la genialidad de alguien, orientada únicamente a transmitir que no todo está bien en esos lugares dispuestos para aparentemente solo gozar, me regocija desde el mismo lugar que se resiste a aceptar que seamos tan lineales que ya sabemos cómo nos vamos a sentir en un lugar solo por lo que tiene a primera vista y me para un poco más en sincronía con en el momento que habito...

Los atardeceres no siempre tienen sol

Y?!! Si no vemos el momento exacto en el que dejamos de ver al sol por ese día… qué?!!

Siempre sufrí ese aspecto del ser humano que hace que un viaje en ómnibus sea una plegaria constante para que el que va al lado no se decida a darle rienda suelta a las ganas que ya mostró que tiene de hablar sin darle sentido alguno al “interlocutor”…
Sin saber cómo lo hago, encuentro algo de eso en común con el aplaudir los aterdeceres!!

Hoy lo que más me molesta de las charlas de ascensor es no saber con qué actitud mía las propicio...

La playita siempre es la playita!!!

Decir vacaciones es en una gran cantidad de casos decir playita, y si bien estar de viaje no es precisamente estar de vacaciones, me da un poco de pudor hablar de las diferencias habiendo tantos puntos de contacto potenciándose a la orilla de cualquier mar!!!

Si tuviera sentido la diferenciación para alguien más que para mí y para la construcción de mi yo viajero, diría algo que tuviera que ver con la dimensión que toma el tiempo para alguien que está intentando dejarse llevar tratando de aprender en dónde es más sano poner su energía, pero ahora que lo siento un poco pienso que eso tampoco es una diferencia…

Paisajes urbanos

 

Siempre me resultó muy curioso la forma bien distinta en la que cada uno muestra bastante de sí mismo en cómo organiza las cosas en los lugares que hace propio… un cuarto… una casa… la ropa en el placard…
Siempre muestra algo de los caprichosos que somos, que si no fuera por lo inocente del intento de esconderlo podría llegar a parecer que no lo somos…

Por momentos me parecen simplemente fascinantes los lugares y las formas en la que los seres humanos construimos lo que parece que necesitamos para vivir, caprichosamente…

Una vuelta a la Isla del Sol

Alguna vez he desconfiado de las construcciones que hago de los lugares que voy recorriendo escuchando las descripciones que otros viajeros hacen de sitios en los he estado...

¡¡¡Qué bueno que hayan lugares que no necesiten ser descritos!!!

Gaviotas Pancho!! señal de que navegamos...

Muchas veces me pega algo como lo que me decía mi vieja cuando yo no quería tomar la sopa, encarando con un discursete que paradójicamente nos hacía decirle que "se ponía Mafalda", en el que el argumento era que "... con toda la gente en el mundo que pasa hambre ..."

Algo medio culpógeno se ve que asimilé, porque en algún momento; cuando estoy en esas situaciones que lo único que puedo hacer es gozar; ya se me ha ocurrido preguntarme cosas como que "cómo permitirme tanto disfrute con tanta gente sufriendo en el mundo...?" 

¡¡¿Cómo no permitirme tanto disfrute en un mundo con tanta gente sufriendo?!!

De lugar que encanta en lugar que encanta

Algunas veces es tan fácil como caminar por la calle para encontrar eso que se le podría contar a otra persona qué fue lo que hizo que un lugar haya sido un lugar…

...otras me ha sido tan difícil que parecería que pasé por ahí casi de la misma manera que en el ómnibus… algunas veces se encuentran cosas que solo algún otro loco o algún otro niño ve, pero están ahí

Algunas veces se encuentran lugares a los que es injusto sacarles una foto…

Hay momentos en los que lo increíble pasa a ser solo inasimilable; en ese instante lo único que queda es la contemplación…

Los aquís y ahoras no se borran… no?!

Y no estoy hablando del stencil que una cristiana con todas letras no me dejó de terminar de hacer, en un ataque de pavor que le dio al ver lo que este pagano estaba haciéndole a la Casa del Señor…

Más bien estoy pensando en el registro que dejan esos momentos en los que se prende esa lucesita que nos hace sentir cosas como “ah!! claro!! era así la cosa!!!”

Porque en esos momentos de claridad, en los que todo parecería ocupar el lugar que recién ahí comprendemos que siempre le correspondió, da ganas de quedarse en esa sensación todo el tiempo... aunque sepamos de eso tan inasequible como el agua que es el presente, y nunca podamos agarrar esos instantes para quedarnos mirándolos, teniéndonos que conformarnos con simplemente contenerlos…

Así que preguntándome por la forma en que se nos quedan esos chispasos de intensidad le elevo un rezo al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo...

Esto se hace caminando...

y... no hay dudas que el ritmo que le da sentido a un viaje que dura lo mismo que la gestación de un ser humano no puede ser mucho más vertiginoso que el del caminar... O puede que sí las haya, pero creo que también es bueno que a esas dudas se las procese a ese mismo ritmo.

Además puede que la vida no tenga más dirección que la del tiempo, así que intentando que esos dos biorritmos se acompasen empecé a caminar un viaje que bastante tiempo después de haberlo comenzado llegó a tener palabras que lo describen, con las que otros viajeros de la nave espacial que es la tierra me ayudaron a comprender algo del sentido que inevitablemente tiene: “libertad y crecimiento”.

Mirando un poquito hacia un poquito atrás

Y este raconto empieza bien empezado el viaje... y aunque hablar de "aquí y ahora" empezando por otros momentos podría parecer un anacronismo tan ridículo cómo imperdonable, por momentos creo que mirar al pasado simplemente es darse el tiempo para que el futuro quede para el otro lado...

Así que en ese medio que es el presente; que casi que no tiene dimensión por ser la frontera entre dos cosas que se suceden continuamente con total continuidad (si me permiten el matematicísmo); pero que es el único que habitamos realmente, voy a tratar de llegar hasta este momento recorriendo algunas de las cosas que me vienen trayendo hasta la puerta de lo que sigue.
Pues hasta entonces!!!